La empresa comenzó a seleccionar clientes y socios que quieran experimentar con servidores basados en ARM como una forma de testear las propiedades de su producto.
Además Dell planea ofrecer también a los desarrolladores y socios con acceso remoto que tengan instalado los servidores Cooper basados en ARM su Centro de Soluciones y el Texas Advanced Computing Center (TACC) para pruebas adicionales.
En vista de ello, la compañía asegura haber recibido en el último año un número creciente de solicitudes para obtener servidores ARM. Estos dispositivos no son tan poderosas como sus contrapartes x86 y se limitan actualmente a tecnología de 32 bits, lo que representa un problema de compatibilidad con sistemas de 64 bits.
Sin embargo, los servidores basados en ARM requieren menos energía para generar un mejor rendimiento, que las hace atractivas en sectores donde la eficiencia es de suma importancia.
Los servidores Cooper de Dell permiten albergar 48 discos unidades SSD de 15 vatios cada uno, lo que permite a un servidor completamente equipado funcionar con menos de 750 vatios.
Dell espera que a medida que los desarrolladores siguen poniendo a prueba las capacidades de los servidores basados en ARM, el apoyo hacia un ecosistema de código abierto crecerá.
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